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jueves, 8 de agosto de 2024

LO QUE TIENES, NO DEFINE LO QUE PUEDES SER

Me siento anclada aquí en la silla, sin poder moverme. Echando horas para no echarte de más.

Pues ahora mismo lo único que tengo a mi alcance es lamentar las horas que pierdo pensando en ti sin invertirlas en mí.

Sigo intentando buscarle un sentido a mi vida, a mis horas, a mis lamentos y a mis días.

Sigo intentando comprender las cosas, sigo intentando mejorar como persona.

Perdonar, amar, sobrevivir. 

Este lugar me resulta siempre inhóspito. No hay forma alguna que yo pueda entender la vida que no sea a través de lo carnal, lo animal y lo primitivo. 

Porque todo en mí es primitivo:

Mi forma de tocar, de amar, de fo***, mi forma de caminar, de mirar, hasta de pensar. 

Me he vuelto un ser que solo se nutre a través de impulsos, de lo más primario del ser. 

Nada me atrae, nada me resulta atractivo si no hay piel y vísceras. 

Todo es rutina, todo es algo banal para mí.

Tu tacto se ha vuelto algo desconocido, ya no me sumerjo en el placer ni hay conexión alguna con el ser. 

Todo parece vacuo. Beber de tu boca se ha convertido en algo que me desespera. 

Ya no me tocas el alma. Ni yo misma sé cómo hacerlo. 

No dejo de pensar en mil oportunidades que se pueden crear en mí.

Pero todas me alejan de ti. 

No hay forma alguna de mantenerme cerca, no hay verso alguno de mantenerte cerca. 

Tu sonrisa, que iluminaba todo a su paso, que gozaba del sabor de la mía, que alimentaba mi oscuridad, ahora se ve lejana, apagada y sin vida. 

¿Ahuyenté yo todo eso de ti? Te convertí en huraña, recelosa y ¿sin ganas de mí?

Perdiste la pasión de los primeros días, la gozosa sensación de ser mía. 

Te nutrías de mi seguridad, apoderándote de mi cuerpo, mis ganas, mi vida. 

Me hacías toda tuya, me llenabas el alma, las ganas.

La ilusión de los primeros días, se agotó, como se agotan los llantos.

Se agota el deseo, que mantiene  la dicha. 

Y es pues el deseo, ¿algo transitorio? ¿Es aquello que nos sostenía? No eran los cariños, los abrazos y ¿las promesas?

¿No era todo aquello que construimos? 

¿Tan volátil y tan  fácil de derribar?

Muros hechos con hierro de Chillida, monumentos de calles silenciosas, ley de hielo.


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